domingo, 26 de octubre de 2008

EX LIBRIS JAPONESES (VII)



El baño

Otro ex libris de Hiroo Yamaguchi: un baño en las montañas, a la orilla de un río de fuerte caudal. No sé si el lugar existe, ni si se trata de una escena ritual o tradicional como bien lo sugiere la imagen; tampoco puedo decifrar la inscripción.

La escena se antoja, irresistible. Una mujer entra a un onsen, poza de aguas termales. El agua está muy caliente; lo sugiere el vapor: tinta serigráfica, esgrafiada, de blanco intenso en la superficie de la estampa. Está desnuda, pero lleva un objeto de color carmín, una suerte de tela, tal vez (toalla, bata, piel recién desnuda que sujeta aún la cubierta a su cuerpo). O mira atenta la pequeña hoja a la orilla de la alberca o cierra los ojos plácidamente.

En lo alto, un tejado deja ver un par de piernas desnudas dispuestas a alcanzar a la mujer de sujeto peinado. El personaje, cuyo sexo tampoco lo sabemos, baja una escalinata; no sé si sea por la torpeza del artista o del caminante, pero la baja a tropezones; si me permites la invención, temor al encuentro o quizás a la temperatura del agua.

El artista, Yoshiaki Hara, es famoso por sus serigrafías en el mundo ex librístico. Asiste a cada congreso. Él es de mirada brillante, tímido, callado, esbelto, incluso hermoso. Entre sus ex libris hay escenas de montes y volcanes. La última vez que coincidimos se me ocurrió un ex libris de doce tintas –o nueve, como en esta estampa– en detallada serigrafía de Hara, con el Popocatépetl y el Iztaccíhuatl (recién habíamos diseñado el libro El mito de dos volcanes, para la exposición en el Museo del Palacio de Bellas Artes). Cuatrocientos euros por veinte ex libris, me dijo Hara en un papel después de descifrar mis señas. “Algún día”, dije yo, en un castellano bastante atropellado, incomprensible para cualquiera, pero aún más para mi interlocutor.

1 comentario:

Aurelio Asiain dijo...

La inscripción dice Onsén (温泉) Shionoyu (塩の湯) en Tochigi (とちぎ en hiragana, es decir 栃木県, prefectura deTochigi). Onsen es literalmente "poza de aguas termales", pero en el letrero y el uso corriente significa "lugar de aguas termales". Tal vez habría simplemente que decir: "Baños Shionoyu". Shionoyu es nombre propio que comparten varios onsen: quiere decir "Agua caliente salada".

El Onsen Shionoyu de la inscripción se fundó en 1674, cerca del pueblo de aguas termales de Shiobara, que incluye una docena de onsén y es mucho más antiguo (se fundó en 806). La página de la wikipedia sobre el Onsen Shionoyu: http://ja.wikipedia.org/wiki/塩の湯温泉_(栃木県) dice que la temperatura del agua va de 40 a 57℃; no es que varíe, sino que hay varias tinas de distintas temperaturas, en ese rango.

Bañarse en aguas termales es pasatiempo nacional japonés y los onsen suman cientos. Es práctica de orígenes seguramente religiosos, ligada a los rituales shinto de purificación. De modo que la escena es tradicional, contemporánea y de orígenes rituales.

Antes del contacto con Occidente, los baños eran mixtos, y así siguieron casi todos hasta que el puritanismo norteamericano obligó a la separación de sexos, sobre todo después de la segunda guerra. Hoy no hay ningún onsen en Tokio u Osaka que no la practique, pero sí en otros lugares. El Onsen Shionoyu es mixto, y las piernas que bajan las escaleras bien pueden ser masculinas. Pero no bajan con temor al encuentro: los japoneses miran la desnudez con naturalidad y acuden a los baños sin morbo. Tampoco tendrá temor al agua, eso es seguro. En unos momentos estará disfrutándola como la mujer que, sí, cierra los ojos para reconcentrarse el placer.

Un baño al aire libre, como el del dibujo, es un rotenburo (露天風呂), y el del Shionoyu tiene nombre: "Rotenburo Miogaya". Tiene fama de ser uno de los mejores de Japón. En parte es, supongo, por la vista al río Kanomata.